El empaquetado del producto es, si lugar a dudas, uno de los aspectos más importantes a la hora de realizar un envío. Es de hecho uno de los puntos que más pueden ayudarnos a mejorar la imagen que nuestros clientes tienen de nosotros y, al mismo tiempo, ayudarnos a fidelizarles para futuras compras. Por ello, en Ipso Facto, desde 1992 sabemos cómo se debe llevar a cabo este proceso. Muy atento a estos consejos que con toda seguridad pueden ayudarte mucho.
En primer lugar, a la hora de llevar a cabo el empaquetado del producto debemos tener en cuenta su peso. Además del tamaño, este es uno de los aspectos que más influyen a la hora de evitar daños sobre nuestro envío. Por ello, si quieres hacer el empaquetado de un producto que pesa más de 20kg lo ideal es emplear para ello una caja con ranuras dobles o triples cuyo material sea el cartón.
Si tu envío pesa más de 50kg lo ideal es utilizar cajas de otros materiales. La madera es una buena opción, sin embargo también existen las alternativas de metal y plástico rígido.
Otro de los puntos más importantes a tener en cuenta a la hora de realizar el empaquetado del producto es la cuestión del embalaje. En efecto, debemos evitar a toda costa que el producto «baile» dentro de la caja para lo cual el embalaje sirve para encajarlo en dicho espacio y, al mismo tiempo, evitar que sufra con impactos.
En el caso de objetos que sean frágiles es de especial importancia que el embajale sea 2 veces más grande que el propio producto. Para esta tarea el plástico de burbujas, la tela y el poliestireno son opciones muy recomendables.
En el empaquetado del producto existen algunas excepciones que debemos tener en cuenta. Por ejemplo, para el caso de objetos que vayan dentro de un marco (pinturas, retratos, etc.) debemos asegurarnos a la hora de empaquetar el producto de que esté recubierto por un marco de la misma medida.
En cuanto al empaquetado del producto para el caso de los muebles debemos enviarlos desmontados siempre que sea posible. Al mismo tiempo, es mejor emplear para cada una de las piezas un embalado de cartón recubierto de plástico de burbujas.
Para el empaquetado del producto en el caso de objetos frágiles debemos buscar cartones que estén adaptados. En efecto, embalajes de cartón que estén lo más ajustados posibles y, al mismo tiempo, una envoltura de 2 veces el tamaño del producto para ellos es ideal. Hay que asegurar una separación de entre 3cm y 6cm para cada pieza.
Por lo demás, siempre debemos tener en cuenta que a la hora de hacer el empaquetado del producto es mejor que no haya espacios libres. Respecto a su cierre, contaremos con cinta resistente a frío, humedad, etc. Esto es especialmente importante para el caso de materiales como libros, documentos o aparatos electrónicos.
Por último, respecto a su posición debemos procurar que sea lo más vertical y firme posible. Con ello nos aseguraremos de evitar todos los movimientos posibles que puedan dar lugar a roturas. Cuenta con Ipso Facto y una forma cuidadosa y de garantías para hacer envíos en toda Barcelona y también a otros puntos de España.